El Mazda CX-5 estará disponible en versiones de tracción delantera y tracción total, en ambos casos con el motor de gasolina de 2,5 litros e-Skyactiv G 141, con sistema de hibridación ligera Mazda M Hybrid de 24V y transmisión automática de seis velocidades. Desarrolla una potencia de 141 CV (104 kW) y la variante de tracción delantera hace el 0 a 100 en 10,5 segundos, alcanza una velocidad máxima de 185 km/h y su consumo medio es de 7,5 litros. todo ello con la etiqueta ECO que obtiene gracias a su tecnología de microhibridación.

Fiel al estilo Mazda

Su diseño exterior se ha renovado, aunque mantiene el ADN de la marca, con llantas de 17 pulgadas en el nivel de acceso y de 19 pulgadas en el resto de acabados. Respecto a la anterior generación, la longitud del nuevo Mazda CX-5 crece hasta los 4,69 m  (+11,5 cm),  la anchura se va a 1,86 m (+1,5 cm) y la altura a 1,69 m  (+3 cm) de alto.

El espacio de las plazas traseras es ahora mayor, gracias al aumento de la batalla, un factor que resulta especialmente práctico para familias. Su banqueta puede abatirse en tres secciones 40/20/40, y la capacidad de maletero es de 583 litros (+61 litros).

Centrado en el conductor

En su interior, destacan los asientos mejorados, y un salpicadero muy limpio y simplificado, con la atención centrada exclusivamente en el volante y las pantallas del cuadro de instrumentos y la central del sistema de infoentretenimiento. Esta última puede ser de 12,9 o 15,6 pulgadas, según la versión y su manejo es similar al de un teléfono móvil al ser el primer modelo de Mazda que cuenta con Google integrado.

El nuevo Mazda CX-5 va a comercializarse en cuatro niveles de acabado: 'Prime-Line1', 'Centre-Line', 'Exclusive-Line' y 'Homura'. Las versiones superiores cuentan con techo solar panorámico y la top de gama, Homura, incluye además iluminación ambiental en las puertas.

Mazda España acaba de abrir la hoja de pedidos del nuevo CX-5 con precios de lista a partir de 35.200 euros; las primeras unidades se entregarán ante de finalizar el año.